Esta sencillez y capacidad han abierto la puerta a tecnologías sorprendentes que eran casi imposibles hace unos años. Los usuarios profesionales se han beneficiado de Thunderbolt 3/4 más que cualquier otro segmento del mercado. Por ejemplo, las GPU externas (eGPU) pueden proporcionar una potencia gráfica adicional a los portátiles (en los que sería imposible instalar una tarjeta GPU normal) simplemente canalizando los datos PCI Express desde una GPU externa a la placa base del portátil, gracias a la conectividad Thunderbolt 3/4. El número de aplicaciones no deja de aumentar, como SSD externos, dispositivos de audio profesionales o dispositivos de captura de vídeo, por mencionar algunos.
Con los profesionales en mente, BenQ ha creado monitores Thunderbolt que se adaptan perfectamente a cualquier proceso con este estándar. Gracias a los múltiples puertos Thunderbolt 3/4 de nuestros monitores, es posible conectarlos en cualquier punto de la daisy chain y seguir manteniendo una conectividad de alta velocidad hacia los periféricos. Esto permite tener, por ejemplo, dos monitores 4K a 60 Hz en cadena y almacenamiento externo, mediante un solo puerto Thunderbolt 3/4, conservando todo el rendimiento.
Configuraciones así son particularmente útiles para quienes precisan la flexibilidad de trabajar desde un portátil, pero requieren una potente estación de trabajo para realizar en su estudio edición de vídeo 4K, rendering de gráficos en 3D y otras tareas pesadas. Ya en nuestro lugar de trabajo, podemos conectar fácilmente una eGPU, monitores dobles e incluso almacenamiento externo al portátil, al tiempo que le proporcionamos corriente mediante un solo cable.